Divagar no es estar perdido,
es apreciar de otra manera,
es tener como objetivo apreciar,
admirar.
Es movimiento en busca de asombro.
Divagar no es salir del camino,
es recorrerlo a otra velocidad.
Divagar hace el camino interesante.
Ayuda a redefinirlo.
Divagar es parte del camino.