Lo interesante es lo que no está escrito,
es lo que no está en las instrucciones,
lo que no está en el instrumento.
Experimentamos con cuerpo y mente.
Y cada uno interpreta según su estado y su disposición. Para todos no es igual. Creamos la realidad con nuestras observaciones, y nuestras interpretaciones.
Hay que dar tiempo para escuchar, y dar tiempo para interpretar, procesar y entender.
Solo si nos abrimos y dejamos que nuestro cuerpo resuene, que la experiencia entre por todos los sentidos y que se procese vamos a ver más allá.