Yo hago cosas bien,
otras no tan bien,
algunas mal.
¿según quién?
Debo ser yo quien haga esa distinción.
Aceptar la información que me dan. Escuchar toda realimentación. E incluso si alguien hizo ese juicio de valor, debo escucharlo.
Al final yo soy quien tengo la última palabra.
Soy quien decido si sigo haciendo las cosas de una manera o empiezo a hacerlas diferente.
Muchos harán juicios, el que realmente importa es el mio.