Ama la máquina, odia la fábrica.
Un lema steampunk.
La fábrica trajo productividad,
exclavizando al artesano,
convirtiéndonos en parte de un proceso,
en tornillos, o engranes.
Ahora las máquinas, todas iguales, “perfectas”.
Y nosotros todos iguales, normales, obedientes.
Nos volvimos parte de la fábrica,
nos volvimos máquinas.
Ama la máquina,
odia la fábrica!